Samuel Huntington, se llenó los bolsillos de verdes billetes con el rostro Frankilin con la venta de su libro: El choque de las civilizaciones, (para entender clique aqui) curiosamente publicado en 1993 (dos años después de la operación Tormenta del Desierto).
En su obra Huntington predijo (sin ser ningún profeta) que un eventual conflicto armado entre los Estados Unidos y uno de los estados Árabes, en el caso Irak, podría ocurrir nuevamente. George Walker Bush, parece que quiso dar una manito a Samuel Huntington a vender más libros, y llevó a cabo una nueva invasión a Irak el 20 de marzo del 2003.
Cuando las Torres Gemelas del World Trade Center fueron derribadas, lectores de todo el mundo, sedientos por cualquier información que explicara el porqué del odio de los árabes hacia la cultura occidental, acudieron en masa a las librerías y sites de venta de libros para adquirir el Choque de las Civilizaciones, afinal el Best Seller se volvió lectura obligatoria. Las personas comenzaram a juzgarse conocedoras de los motivos que llevaron Bin Laden y Cia a planificar el estrelle dos aviones contra el símbolo de capitalismo; matando miles de meseros, secretarias, oficinistas, ascensoristas, recepcionistas, agentes de seguridad privada y funcionários comunes que llegaron puntualmente a sus puestos de trabajo en aquella fatídica mañana del 11 de septiembre del 2001.
Muchos lo leyeron, pero creo que pocos tomaron en cuenta otra predicción de Huntington hace en su libro: Un eventual conflicto armado entre China y Estados Unidos que podría ocurrir en el año 2010 (¡justo en el año del Mundial de Sudáfrica!). Si Huntington es tan bueno como Nostradamus, cualquier estudiante del séptimo semestre de Ciencias Económicas debería saber que Alan Greenspan y el FED no están ni un poco preocupados en reducir el déficit de balance de pagos de Estados Unidos, concentrado en las dos principales economías asiáticas (China y Japón) y sus países emergentes (Corea del Sur y su hermana atómica, Singapur, Taiwan); y que la caída de la Bolsa China hoy no es ningun mal negócio para los inversionistas que cotizan en la industria armamentista.
¿Porque Estados Unidos pagaría una deuda a algunos de estos países? La respuesta es obvia: en una eventual guerra, los vencedores no pagan las deudas, sino los vencidos....
¿Y Bolivia, de que lado estaría en esta hipotética y posible guerra? Yo creo que deberíamos quedar de NUESTRO LADO, es decir vendiendo productos manufacturados y materias primas para que ambos bandos fabriquen armas y se maten.
¿Imagine la demanda de cocaína que tendría la humanidad inconsolable, viviendo en un mundo con una guerra entre estas dos potencias nucleares? ¿Imagine la demanda de hierro y otros minerales que tendrían ambos ejércitos para fabricar armas, tanques, misíles y balas para matarse entre sí? ¿Imagine la cantidad de alimentos que estos países necesitarían importar (libres barreras arancelárias y fitosanitárias) una vez terminada la guerra? ¿Imagine cuanto el Estado Boliviano podría cobrar a los imigrantes orientales para que ingresen al país como refugiados de guerra? ¿Imagine la cantidad de impuestos que se cobraría a los imigrantes orientales por abriren sus negocios de ventas de pollo a la broasted en la Avenida Cañoto? ¿Imagine la cantidad de "cerebros" con formación universitaria vendrían huyendo a Bolivia? El país haría usufruto de sus conocimientos y servicios sin que un sólo peso sea invertido en la formación de nuevos profesionales. ¿Imagine el aporte positivo que la milenar cultura oriental haría a nuestra cultura todavía indigenista y primitiva?